Ven a pasarlo en grande con nuestras experiencias y descubre por qué la risa es contagiosa. La diversión está asegurada en nuestras gymkanas y cluedos.

Seguro que en alguna serie cómica has escuchado esas risas enlatadas que vienen después de una broma o momento ridículo de algún personaje. Pues queridos amigos, eso tiene una explicación: los creadores del programa buscan que los espectadores se rían por imitación de ese sonido. De hecho, suelen usar risas bastante sonoras para provocar una reacción en tu cerebro.

Esa reacción de reírse si ves u oyes risas tiene que ver con las neuronas espejo. Durante los primeros años de la evolución humana la risa era un signo de que no había peligro, una seguridad que se daba al estar en grupo. El ser humano tiende a imitar, desde que somos pequeño y hasta el fin de nuestra vida Por eso, en un ambiente en el que la gente de nuestro alrededor se está riendo nos vemos envueltos en esa risa que, de forma inesperada, sale de nosotros mismos.

¿No crees en el efecto de las neuronas espejo? Pues fíjate en situaciones cotidianas: cuando una persona te habla a susurros, ¿no acabas susurrando?, o cuando ves a alguien bostezar…seguramente lo siguiente que hagas será bostezar. Pues pasa exactamente lo mismo con la risa. ¿O es que no tienes el típico amigo o conocido que tiene una risa contagiosa?

En realidad, tenemos mucho que agradecerles a esas risas que vienen de las neuronas espejo porque reírse tiene muchos beneficios. ¿Quieres saber cuáles son?

• Para empezar la risa es mejor que una aspirina. Cuando nos reímos se liberan endorfinas que tienen un efecto analgésico, capaz de quitar dolores físicos o emocionales.
• Otro de sus beneficios es que ayuda a oxigenar el cuerpo lo que ayuda a tus células a regenerarse.
• Ayuda a relajarse y a aliviar el estrés.
• Mejora la circulación y fortalece nuestro corazón.
• A nivel social, ayuda a reforzar las relaciones interpersonales y reforzando la confianza con unos y otros. Además de aumentar la autoestima y el sentimiento de pertenencia a un grupo.

Con todas estas ventajas parece que reírse es obligatorio para mejorar nuestra vida y nuestro bienestar. Por eso, no podemos dejar la oportunidad de recomendaros nuestras experiencias. En nuestras gymkanas y cluedos os convertiréis en los protagonistas de aventuras increíbles donde las diversión y la risa no pueden faltar.

Por ejemplo, las risas no faltan en la gymkana de El misterio de Goya mientras los jugadores pintan o cantan con nuestros actores infiltrados. Tampoco cuando se transforman en Romeo y Julieta en una de las pruebas más divertidas de Tú sí que viajas. Y más de una risa se escucha cuando nuestro coronel de KGB: Misión Madrid recibe a los aspirantes a espías.

La diversión en nuestros cluedos también es el elemento principal. En ellos os pondremos en situaciones donde tendréis que improvisar y meteros en el papel de un personaje que puede ser totalmente opuesto a vosotros. Las risas vienen cuando en Caso Fantasma os transformamos en un mayordomo que tiene que recoger la suciedad que deja el señor de la casa o cuando comienzan nuestros rituales para hablar con el fantasma de Lord Cornwell. También hay momentos de risa en Crimen en Doublebottom cuando tienen que improvisar un teatrillo o comprometerse con otros personajes para conseguir sus objetivos.

Para que las risas nunca fallen lo mejor de todo es que vengáis a nuestros juegos con vuestros amigos o familiares. Compartir unos momentos así os unirá aún más mientras creáis recuerdos compartidos inolvidables. chado esas risas enlatadas que vienen después de una broma o momento ridículo de algún personaje. Pues queridos amigos, eso tiene una explicación: busca que los espectadores se rían.

Esa reacción de reírse si ves u oyes risas tiene que ver con las neuronas espejo. El ser humano tiende a imitar, desde que somos pequeño y hasta el fin de nuestra vida, por eso, en un ambiente en el que la gente de nuestro alrededor se está riendo nos vemos envueltos en esa risa que, de improviso, sale de nosotros mismos.

?¿No crees en el efecto de las neuronas espejo? Pues fíjate en situaciones cotidianas: cuando una persona te habla a susurros, ¿no acabas susurrando?, o cuando ves a alguien bostezar…seguramente lo siguiente que hagas será bostezar. Pues pasa exactamente lo mismo con la risa.

¿Qué cómo lo sabemos? Pues porque lo vemos cada vez que realizamos una prueba con nuestros equipos o les ponemos en situaciones desternillantes. Cuando empieza uno…es un no parar. ¿Sigues sin creernos? Entonces tendrás que comprobarlo tú mismo.